Otra desprolijidad. Y van...

Es el tercer técnico en muy poco tiempo que se devora esta conducción. Y los tres -quedará para otro momento coincidir o no con la decisión- fueron echados de manera bastante desprolija.
El caso de Llop es aún más raro que el de Patricio o Leeb ya que el ex Godoy Cruz nunca contó con el respaldo general del público y varios dirigentes lo miraron de reojo, expectantes ante el mínimo traspié. Pero el asunto era que el equipo, al menos numéricamente, respondía.
Lo que resulta aún más desprolijo es que se hable de “no colmar las expectativas” y que paso siguiente se anuncie a Miguel Jerez como técnico hasta junio. Quizá Jerez cumpla una buena campaña y empiece una gran carrera como técnico pero deberá saber que para cumplir las expectativas de Portell el equipo debe terminar arriba del tercer puesto.

El tiempo empezará a acomodar o a desacomodar más las cosas. Y como todos sabemos, si Banfield pierde ante Argentinos el sábado se acelerará la búsqueda de un nuevo entrenador. Esa que había empezado en la previa del clásico ante Lanús, pero que no pudieron concretar porque resultaba muy alevoso hacerlo tras una goleada histórica.

Hoy es... San Patricio

Parece que fue hace una eternidad pero aún dura la resaca

A comienzos del año pasado volvió al club con la promesa de ser “el DT con más horas de trabajo” del fútbol argentino. ¿? Con su fichas listas para ser impactadas sobre un pizarrón, luego de dar cátedra en la tevé y enseñarles a técnicos y a jugadores cómo debían hacer las cosas, se volvió a poner el buzo del Taladro "con el objetivo de saldar una deuda pendiente".

Lo concreto es que, desde el inicio, su labor empezó a dar señales particulares.

• En lo extra futbolístico, por ejemplo, hizo que colocaran un alambrado rodeando la cancha en la que habitualmente practica el equipo en el predio para que los periodistas no estuviesen tan cerca de sus estrellas.
• También se rodeó de un particular ¿? cuerpo técnico entre los que se destacaban Vitamina Sánchez (no se conocían de antes y fue su futuro Judas) y un preparador físico que prefería ir al shopping con su mujer antes que reconocer los estadios del exterior.
• En cuanto a lo futbolístico, trajo a José Chatruc, Julián Maidana y compañía para jerarquizar al plantel y se enojó porque finalmente no arribaron Tomatito Pena y a Gustavo Barros Schelotto.

Los resultados ya los conocen todos pero como recuerdo de esta campaña basta refrescar la formación del equipo (tomen nota de la defensa) en el debut ante Boca (0-3) el 10 de febrero de 2007 en cancha de Racing: Lucchetti; Galván, Maidana, Sanguinetti; Salvatierra, Villarreal, Santana, Civelli (después Esteban), Andrizzi; Morales (después Barrales) y Lujambio (después Cvitanich). Cabe recordar que Boca ya había acordado la vuelta de Riquelme, pero que recién debutaría la fecha siguiente.

La historia de Patricio terminó el viernes 16 de marzo, tras la derrota 2-0 como local ante Estudiantes. Aquella noche el Florencio Sola fue un Cabildo Abierto. Los hinchas insultaron primero al entrenador y luego a los jugadores haciendo foco en los más grandes del plantel: Sanguinetti, Galván, el Pulpo González y Julián Maidana. Esa misma noche, Carlos Portell anunció la salida del técnico.

Hoy en su día lo recordamos

Boca ya marcó territorio

En reunión de Comité Ejecutivo se encontraron, como tantas otras veces, el presidente de Banfield, Carlos Portell, y dos de los máximos dirigentes de Boca: Pedro Pompilio y Juan Carlos Crespi.

Luego de las felicitaciones mutuas y de una charla amena, los representantes de la entidad de la Ribera enfocaron los cañones hacia su nuevo objetivo: Darío Cvitanich.

Según las propias palabras de Portell "Boca ofreció 3 millones de dólares por el 50 por ciento del pase" aunque Banfield "pedirá cerca de diez millones por la totalidad".

"No descartamos una transeferencia al fútbol local, pero por las cifras que se manejan, Darío tendría futuro europeo", dijo Portell en La Red.

Para la historia

De esos partidos que inevitablemente dejarán huella
Una marca indeleble tanto para Banfield como para Lanús

Las Claves:

- La rebeldía. El equipo supo entender que era “el” partido y lo jugó distinto.

- Los extremos. De un lado, Lucchetti: sólido ante cada llegada y manteniendo alerta constantemente a sus defensores. Del otro, Cvitanich: jugó tan bien como otros partidos, con la diferencia de que esta vez la defensa de Lanús colaboró para que tenga su tarde inolvidable.

- Los que no salen en las fotos. Gran partido de Galarza, quien controló muy bien a Valeri y no le hizo una sola falta a Biglieri. Otra vez prolijo lo Villarreal, haciendo los relevos de Patiño y Civelli. La firmeza de Herner: el central venía teniendo partidos para el olvido pero fue mucho más duro que Sand en el duelo personal y despejó todo lo que cayó en el área.

- El respaldo. Indudablemente los jugadores despejaron dudas en cuanto a su relación con Llop. Abrazo del Laucha con el DT en el gol de Civelli y declaraciones positivas de los referentes. Todos van por la misma vereda.

- La fortuna. Obviamente no se consigue una goleada así sólo con suerte, pero sí fueron vitales los momentos en los que Banfield metió el segundo y el tercer tanto.

8 - 3 - 08

5 - 0

"Papá por siempre"

En los últimos clásicos siempre faltaba algo para redondear una buena alegría. Se ve que había que esperar el momento justo. Y finalmente se dio. En el clásico en el que más cosas habían en juego (futbolísticas y extra futbolísticas) todo fue felicidad para Banfield.
Esta vez no falto nada. Como en aquél 5-0 a River cuando el equipo también llegaba golpeado y también llovía. El tiempo le dará la justa dimensión a semejante victoria. Hoy es momento de disfrutar, de respirar hondo y de gozar un tiempo largo.

Plan B

El rumor comenzará a instalarse de a poco y tomará fuerza si Banfield pierde el clásico del sábado ante Lanús. Lo que hoy es sólo un trascendido indica que algunos dirigentes de segunda línea del Taladro ya habrían tanteado a Jorge Burruchaga. Esto no quiere decir que hayan hablado directamente con el entrenador o que ya tengan asegurado un futuro acuerdo, pero sí dialogaron con allegados para hacerles saber que ante una renuncia de Llop (nadie lo va a echar) el ex Independiente sería el candidato número uno para dirigir a Banfield.

Lo que no es un rumor y se pudo comprobar en el último juego del Taladro ante Arsenal fue la presencia de Pulsiano Aquino, ayudante de campo de Burruchaga, en la platea. Quizá esto no tenga nada que ver o quizá sea uno de los primeros eslabones que unen a Burruchaga con Banfield.

En caso de un resultado negativo ante Lanús seguramente saldrán a la luz estos rumores. En cambio, si el equipo gana, todo quedará en la nebulosa y en "la mala intención de algunos periodistas que no tienen nada que hacer e inventan cosas cuando en realidad todo marcha bien".

Precipicio a la vista

La derrota 3-1 contra Arsenal elevó al máximo el nivel de tensión y puso al clásico del próximo sábado como la bisagra para el futuro.

Si Banfield pierde contra Lanús, las consecuencias seguramente serán las que todo el mundo imagina.

Ahora, si por esas cosas que poco tienen que ver con la lógica y mucho con el fútbol, el equipo de Llop gana, todo se olvidará y dará paso a un posible envión anímico para el futuro.

Este análisis tan lineal parece ser el que domina estos días a Banfield.
Pero también hay otras cosas que son preferible destacar ahora, sin tener en la mano el peso (positivo o negativo) del resultado contra Lanús.

• ¿Por qué se vendió a Maidana cuando recién daba sus primeros pasos en Primera y ni había convertido un gol?
• ¿Por qué no se incorporó un reemplazante?
• ¿Recién ahora se dan cuenta que era "le distinto" del equipo?
• ¿Quién eligió a Andrés Díaz y a Martín Rodríguez? Si fue Llop, ¿por qué no los banca?
• ¿En qué puesto de la cancha se siente más cómodo Jairo Patiño?
• ¿A los dos zagueros le gusta que el técnico los recrimine en medio del partido ante cada falla?

Son algunas de las muchas preguntas que hoy no tienen respuestas y que se unen para formar este mal momento de Banfield. Hoy el plantel tiene la suerte de tener por delante el clásico ante Lanús. Si lo gana todo volverá a estar bien. Porque como viene ocurriendo desde hace años... el árbol tapa al bosque.